LA HIGIENE DEL PERRO (EL BAÑO)

El perro tiene que se sometido de forma periódica , a medidas higiénicas y una de las más importantes es el baño. No solo por razones de belleza, sobretodo por motivos de higiene y para que  se sienta a gusto. También es importante, cepillarle el pelaje, limpiarle las orejas  y cortarle las uñas.

Nos centraremos en el baño, una idea que esta totalmente superada, es la de que no hay que bañar al perro durante el primer año y que después se debe hacer con la menor frecuencia posible. Cuando el perro es mayor, se pueden utilizar champus no alcalinos para perros.  Hay que tener en cuenta que a los cachorros   no se les debe bañar hasta que hayan sido vacunados y tengan, como mínimo , 12 semanas.  A los perros adultos cada tres meses o cuando huelan mal. A las perras hay que bañarlas después del celo.  Debemos tener en cuenta que el baño frecuente no es bueno, hasta el mejor champú de belleza elimina algo de la grasa que el pelaje necesita para proteger al perro contra el frió, la lluvia y otras inclemencias. Una buena temperatura del agua son 34ºC, hay que tener cuidado de que no les entre agua en las orejas ni champú en los ojos. Normalmente son reacios a la bañera o la ducha, pero luego son capaces de meterse alegremente en cualquier charca o arroyo.  

A los perros de pelaje largo y espeso, como el perro lobo ingles o el chow chow, después del baño huelen intensamente a perro, para evitarlo mejor que bañarles es peinarles y cepillarles todos los días, teniendo en cuenta de no dañar las gandulas sebáceas. Lo que si hay que lavar con frecuencia son las partes del pelaje humecidas por la orina. Muy importante es el secado a fondo.